EL CORDERO DE DIOS
INTRODUCCIÓN
Me ha llamado la atención las referencias hechas en las Sagradas Escrituras,
en relación al Cordero de Dios. No soy un lector consumado de la Biblia, conozco
mucho de ella, pero confieso que no la he leído completa, solo lo hago cuando hay
algo que me interesa investigar o aclarar, como en este caso del Cordero de Dios.
Voy a tratar de mostrar cómo Dios Padre nos hizo una promesa, desde el
comienzo (Adán y Eva), que cumplió con Jesús, por eso se habla del Plan de Dios
para con los Hombres, para bien de la humanidad.
Voy a tratar las referencias por separado, tratando de ser lo más sucinto
posible, para honrar el tiempo que le dediques a esta lectura.
1. EN GÉNESIS
Luego de la Desobediencia de Adán y Eva, el Pecado Original, éstos salen
del Paraíso, como consecuencia de su pecado,
En la página http://www.abideinchrist.org/es/gen3v21es.html nos dice que
Adán y Eva trataron de cubrir su culpa y la vergüenza de Dios (se vieron desnudos),
pero escogieron una túnica muy pobre (las hojas de parra). Este problema les fue
resuelto por Dios (Génesis 3:21). "Y Jehová Dios hizo para el hombre y su mujer
túnicas de pieles, y los vistió.", por lo que estas túnicas se convierten en símbolo de
su justicia. Estas túnicas de piel con las que el Señor vistió a Adán y a Eva
representan la justicia proporcionada por El, en el cual ellos podrían estar en Su
santa presencia. Se infiere aquí un primer Sacrificio.
Se infiere aquí el sacrificio de animales de dónde se extrajeron las pieles.
2. CON CAÍN y ABEL:
Otro evento en el que se pone de manifiesto el Cordero de Dios, es en la
tragedia de Caín y Abel. Como se sabe, siendo Abel pastor y Caín agricultor, ambos
hicieron al Señor sus ofrendas de sus frutos, “Y miró Jehová con agrado a Abel y a
su ofrenda” (Gen: 4:3), lo cual no agradó a Caín, y por eso la dá muerte a su
hermano. La ofrenda de Abel era un cordero, blanco puro, sin manchas, por eso su
agrado, y ya habla en lontananza de la promesa Divina.
3. CON ABRAHAM e ISAAC
En este episodio, Dios le pide a Abraham sacrificar a su único hijo, como una
ofrenda (Gen: 22-1), a lo que Abraham aceptó a regañadientes; el inocente niño
increpa a su padre, al momento de dirigirse al sitio del sacrificio, que falta el cordero,
a lo que Abraham responde “Dios proveerá”; y llegado el cúlmen del sacrificio. Dios
detiene la mano de Abraham impidiendo el sacrificio, y alabando la obediencia de
Abraham; en ese momento vieron que había aparecido un cordero, puro y sin
manchas, apto para el sacrificio.
4. El CORDERO CON MOISES
La sangre del Cordero aparece una vez más en el momento en que Moisés pide al
Faraon sacar a su pueblo de Egipto. En el momento de la Plaga del Primogénito
Dios le pide a Moisés indicar a su pueblo marcar el marco de la puerta de su casa
con Sangre del Cordero Pascual, para señalar que en esa casa hay parte de su
pueblo; Pues yo pasaré aquella noche por la tierra de Egipto, y heriré a todo
primogénito en la tierra de Egipto, así de los hombres como de las bestias
(Exo:13:12); y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de
mortandad cuando hiera la tierra de Egipto (Exo:13:13).
Otra referencia aparece en Exo: 29:38-42, en donde Jehova establece la forma de
cómo hacer los sacrificios: “Esto es lo que ofrecerás sobre el altar: dos corderos de
un año cada día, continuamente”
5. EN EL COMPLOT DE JEREMÍAS
En Jeremías 11:19, él descubre el complot en su contra y dice: “Y yo era
como cordero inocente que llevan a degollar, pues no entendía que maquinaban
designios contra mí”. señalando al inocente cordero.
Hay otras concordancias que pudieran tratarse, pero para concretarnos en la
presente, las dejaremos para otra oportunidad.
Las siguientes referencias ya son del Nuevo Testamento:
6. En la 1ra DE PEDRO 1:18 al 21
“sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual
recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata,
19 sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y
sin contaminación, 20 ya destinado desde antes de la fundación del mundo,
pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros, 21 y
mediante el cual creéis en Dios, quien le resucitó de los muertos y le ha dado
gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios.
En esta referencia, Pedro nos recueda la promesa hecha por Dios de
enviar el Cordero para que, con su sangre nos redimiera del pecado y nos
diera la Vida eterna.
CONCLUSIÓN
En todos los casos aquí mostrados, el Cordero fue proveído por Dios, por lo que la
promesa hecha en el Génesis fue cumplido con Nuestro Señor Jesucristo, y he allí
de donde proviene la comparación del Cordero con Jesús.